Gracias por el sentido
por el ardor y el respiro
gracias por la noche
y su carga de luceros.
Sólo soy una ventana
que se presenta sin cortinas.
Al viento y a la calma
me presento sin voz.
Y digo gracias en mi silencio
en el sonido de mis pasos.
En el recorrido pequeño
de mis pies olvidados.
Gracias por el arte
de pintar vocabularios
a la sombra de la incógnita
a la luz del mundo.
Gracias por todo.
De "Periferia" (2005)