Carne faenada. No sabemos
qué parte del animal es, aunque algunos
lo saben y prefieren callar o mirar
para el lado. El panorama de los mataderos
es la grieta más profunda del corazón humano.
Engullo la hamburguesa con un dejo de asco.
La mezclo con fideos y queso rallado
para que no se note tanto el gélido aliento
de la matanza suburbana.
No hay pausa
en la exhibición de la miseria.