Las lágrimas en el
corazón
la libre estepa del olvido
la incansable gotera
del patio
el reloj tan
incansable como ella
en su merodeo por el
misterio
No olvidar tejidos
tristes
horas estancadas
en la arena que somos
frutas agridulces
como merienda
A veces tosíamos
a veces amábamos
olvidábamos
nacíamos
No olvidar su
fotografía
Hay que seguir
esperándola
de
cierta forma* Poema de "Nueva Residencia"